El desempleo juvenil en España es una problemática que ha alcanzado proporciones alarmantes en los últimos años, hasta el punto que casi 2 de cada diez jóvenes europeos en paro son españoles. A medida que la economía global enfrenta desafíos significativos, los jóvenes españoles se encuentran particularmente vulnerables ante la falta de oportunidades laborales.
Según la infografía de VisualCapialist, España tiene el desempleo juvenil más alto de la OCDE, con un 27,4% de dicha población, según datos de junio de 2023 (cierre del segundo trimestre), el doble que la media de la Unión Europea. Es decir, casi 3 de cada 10 adultos jóvenes en edad de trabajar sigue sin poder encontrar empleo.
Si profundizamos más en esas edades, observamos que entre los menores de 30 años el empleo bajó en 4.200 personas y la tasa del paro, en este segmento, sube hasta un 22,61% en el primer trimestre del año. Para los menores de 25 años, la preocupación es, si cabe, mayor, ya que la tasa de paro es del 30,03% en este segmento.
Son datos y cifras desalentadoras que, además, en España se han convertido en una problemática estructural. De ello, “surgen una serie de retos importantes que deberían plantear reformas responsables a nivel europeo donde colaborásemos la sociedad civil y los entornos políticos para plantearnos las preguntas esenciales y, de este modo, encontrar las respuestas adecuadas de cara a resolver este problema” destaca Amanda Augustine, experta en desarrollo del talento. Entre tanto, desde CVapp hemos reflejado algunas de las posibles causas y también nos aventuramos a proponer algunas de las soluciones que están a nuestro alcance para tratar de contener este problema tan grave.
¿Cuáles son las causas?
Factores económicos
Crisis económicas y ciclos recesivos
Este problema estructural de la sociedad se ha visto agravado por la recurrencia de crisis económicas en España, particularmente la crisis financiera global de 2008 y la reciente pandemia de COVID-19, ha dejado secuelas significativas en el empleo juvenil. Durante estos períodos, las empresas han reducido sus operaciones y disminuido la contratación de personal, afectando de manera desproporcionada a los jóvenes que buscan ingresar al mercado laboral.
Contracción del mercado laboral
La contracción del mercado laboral, resultado directo de la incertidumbre económica, ha limitado las oportunidades para los jóvenes. Las empresas, en un esfuerzo por mantener la estabilidad financiera, a menudo implementan medidas de austeridad, reducen costes y limitan la contratación de nuevos empleados. Esto afecta de manera negativa a aquellos que buscan empleo por primera vez.
Falta de inversión y desarrollo empresarial
La falta de inversión en sectores clave y el estancamiento en el desarrollo empresarial también contribuyen al desempleo juvenil. La ausencia de nuevas empresas y la falta de diversificación en la economía limitan las oportunidades laborales disponibles para los jóvenes. Fomentar un entorno propicio para la inversión y la innovación se vuelve esencial para crear empleo sostenible a largo plazo.
Precariedad laboral y contratos temporales
La prevalencia de contratos temporales y empleos precarios en el mercado laboral español afecta desproporcionadamente a los jóvenes. La inestabilidad laboral dificulta la planificación a largo plazo y limita la capacidad de los jóvenes para acceder a servicios financieros o planificar su futuro.
Desajuste de competencias y demandas del mercado
La falta de matching entre las habilidades adquiridas por los jóvenes durante su formación educativa y las demandas del mercado laboral es otro factor económico crucial. Este desajuste entre la demanda de habilidades por parte de los reclutadores y la formación que se reciben en el entorno académico, contribuye a la dificultad que enfrentan los jóvenes al encontrar empleo relevante a sus competencias. En este sentido, se necesita una mayor coordinación entre el sistema educativo y el mercado laboral para abordar este problema.
Factores educativos
Enfoque académico vs. habilidades prácticas
El sistema educativo, a menudo, se enfoca en la adquisición de conocimientos teóricos en detrimento de habilidades prácticas y experiencia laboral. Este área de mejora en la aplicación práctica puede dejar a los jóvenes mal equipados para enfrentar los desafíos del mercado laboral, donde las habilidades prácticas son altamente valoradas. El riesgo aquí es que las empresas prefieran sobrecargar a los empleados más “senior” en lugar de contratar a jóvenes que tienen que aprender a desarrollar las competencias más prácticas.
Insuficiente orientación vocacional
La falta de orientación sobre el futuro profesional que se va a desempeñar en función de los estudios escogidos contribuye a que los jóvenes elijan carreras sin conocer realmente sus perspectivas laborales reales. Esto puede resultar en una sobresaturación de ciertos campos y escasez de habilidades en áreas críticas del mercado laboral.
Necesidad de formación continua
La rápida evolución de la tecnología y las dinámicas del mercado laboral requiere que los trabajadores, estén dispuestos a participar en la formación continua. La falta de énfasis en la educación continua puede dejar a los jóvenes desactualizados en términos de habilidades y conocimientos.
¿Qué soluciones existen?
Soluciones existen muchas y desde diversos ámbitos. Sin embargo, lo que se antoja fundamental es que exista una colaboración público-privada activa que ayude y facilite al estudiante a elegir, con más criterio, un futuro profesional acorde a sus habilidades.
“España necesita una colaboración público-privada muy estrecha para una mejor formación de los perfiles profesionales que vienen. Contar con think-tanks, ratings de universidades o de centros formativos es algo que puede ayudar y que ya se hace en otros países. Contamos con mucha información abierta en plataformas como Glassdoor o LinkedIn que puede ser muy útil para aconsejar en esa toma de decisión tan importante” afirma Amanda Augustine, experta en desarrollo del talento.
Más allá de las causas, debemos poner todos los recursos posibles al servicio de este colectivo al que tanta falta le hace encontrar empleo. No solo un empleo cualquiera, sino uno de calidad. Son la base para que el futuro de España pueda ser próspero.
Reformas educativas
Adaptación del currículo
Alinear el currículo educativo con las demandas del mercado laboral, incorporando habilidades prácticas y transversales desde etapas tempranas.
Orientación vocacional mejorada
Fortalecer los programas de orientación vocacional para ayudar a los jóvenes a tomar decisiones educativas y profesionales informadas.
Programas de formación y empleo
Prácticas y programas de aprendizaje
Fomentar la colaboración entre empresas y centros educativos para ofrecer programas de prácticas y aprendizaje que brinden a los jóvenes experiencia laboral relevante.
Incentivos para empresas que contratan jóvenes
Implementar incentivos fiscales y financieros para las empresas que contratan a jóvenes, alentando así la creación de empleo para este grupo demográfico.
Políticas de empleo y mercado laboral
Reducción de la temporalidad
Implementar medidas para reducir la temporalidad laboral, promoviendo contratos estables que brinden seguridad a los jóvenes.
Flexibilidad laboral
Fomentar políticas que promuevan la flexibilidad laboral, permitiendo a los jóvenes equilibrar sus responsabilidades personales y profesionales.
Emprendimiento y apoyo a startups
Incentivos para emprendedores jóvenes
Establecer programas de apoyo y financiamiento específicos para jóvenes emprendedores que deseen iniciar sus propios negocios.
Incubadoras y espacios de coworking
Crear espacios de colaboración, como incubadoras y espacios de coworking, para fomentar el espíritu empresarial entre los jóvenes.
Desarrollo de habilidades continuas
Programas de formación continua
Establecer programas accesibles de formación continua para garantizar que los jóvenes estén equipados con habilidades actualizadas y relevantes a lo largo de su carrera.
Certificaciones y acreditaciones reconocidas
Promover la obtención de certificaciones y acreditaciones reconocidas por la industria para mejorar la empleabilidad de los jóvenes.
¿Y cómo debe ser el CV de los jóvenes españoles que quieran destacar en las búsquedas de empleo?
Desde CVapp somos conscientes de este problema en España y, por ello, nuestra ayuda va en la línea de elaborar CVs adaptados y personalizados a este grupo. Contamos con CV específico para estudiantes universitarios así como para prácticas profesionales.
En un mundo laboral cada vez más complejo, tener simplemente un CV no basta. Uno de los puntos diferenciales está, justamente, en contar con un CV que aúne un buen diseño con un buen contenido. Que nuestro CV sea conciso y atractivo, que tenga bien definido (con resultados numéricos a ser posible) el bloque de experiencia laboral, que incluya de manera clara y directa las habilidades que uno posee, que cuente con los idiomas (a ser posible con certificaciones oficiales), con una buena redacción, o que esté lo más adaptado posible al puesto al que se aplica, son solo algunos de los aspectos diferenciales a tener muy en cuenta.
En CVapp contamos con muchos recursos para ayudar a los jóvenes a encontrar el trabajo que buscan: plantillas de CV, cartas de presentación, cómo elaborar un buen CV… ¡Y muchos más!
Formato conciso y atractivo
- Opta por un formato limpio y estructurado.
- Utiliza encabezados y viñetas para facilitar la lectura.
- Limita el CV a una o dos páginas para mantener la concisión.
Información personal
- Incluye tu nombre, número de teléfono, dirección de correo electrónico y enlaces a perfiles de LinkedIn u otras redes profesionales.
Perfil o resumen personal
- Agrega un breve resumen que destaque tus habilidades clave y tus objetivos profesionales.
- Menciona tus metas y cómo puedes aportar al empleador.
Experiencia laboral
- Prioriza la experiencia relevante para el trabajo al que estás postulando.
- Incluye pasantías, trabajos a tiempo parcial, voluntariado y proyectos académicos.
- Resalta logros y responsabilidades clave en cada posición.
- Si no tienes experiencia en un puesto concreto, apóyate en una carta de presentación.
Educación
- Lista tu educación más reciente primero.
- Incluye el nombre de la institución, título obtenido y año de graduación (o fecha esperada de graduación).
- Menciona honores académicos y cursos relevantes.
Habilidades y competencias
- Destaca habilidades específicas relacionadas con el trabajo al que estás aplicando.
- Incluye habilidades técnicas y blandas (por ejemplo, idiomas, herramientas informáticas, habilidades de comunicación).
Proyectos y logros
- Agrega una sección de proyectos si has trabajado en proyectos académicos, personales o profesionales.
- Desglosa tus contribuciones y logros en cada proyecto.
Idiomas
- Menciona los idiomas que hablas y tu nivel de competencia.
- Destaca las certificaciones de idiomas si las tienes.
Certificaciones y formación adicional
- Incluye certificaciones relevantes para el trabajo al que estás aplicando.
- Resalta cursos de formación adicionales que mejoren tu perfil.
Referencias
- Puedes indicar que "las referencias estarán disponibles a petición".
- Asegúrate de tener permiso antes de incluir a alguien como referencia.
Adaptación a la oferta de trabajo
- Ajusta tu CV para destacar las habilidades y experiencias que son relevantes para cada oferta de trabajo.
- Utiliza palabras clave específicas mencionadas en la descripción del trabajo.
Presentación creativa
- Añade enlaces a tu portfolio en línea, si tienes uno.
- Utiliza una presentación creativa o visual si es apropiado para tu industria.
Revisión y edición
- Revisa cuidadosamente tu CV para detectar errores gramaticales y ortográficos.
- Pide a amigos o familiares que revisen tu CV para obtener retroalimentación adicional.
Desde CVapp contamos con muchos recursos que te ayudarán a encontrar el trabajo que buscas. Plantillas, CVs, cartas de presentación, cómo hacer un buen CV, y un blog que te ayudarán a enfocar mejor a lo que te gusta,
