Aunque una carta de presentación es bastante más libre que un currículum, es recomendable seguir una estructura determinada. Las secciones siguientes te ayudarán a dividir el proceso de redacción en partes más manejables, para que el seleccionador entienda rápidamente lo que estás expresando en cada párrafo.
Estos son los componentes clave:
- El encabezado de la carta de presentación
- El saludo de la carta de presentación
- La introducción
- El cuerpo de la carta
- La conclusión
- El cierre y la firma de la carta de presentación
Por suerte, la estructura de una carta de presentación es igual tanto si quieres trabajar en Starbucks como en la cafetería de la esquina. Este esquema también puede ayudarte si alguna vez cambias de profesión. Aprender a escribir una buena carta de presentación es una habilidad que puede beneficiarte durante muchos años.
El encabezado de la carta de presentación
Su función principal es mostrar tu nombre y datos de contacto para asegurarse de que el seleccionador pueda identificar rápidamente el documento. El encabezado también sirve para aportarle un toque llamativo al formato. Este es el único lugar donde puedes añadir color o elementos de diseño gráfico a una hoja de papel que de otro modo sería lisa. Pero antes de hacer nada, reflexiona lo que dicen sobre ti como candidato los colores y el diseño gráfico que elijas para tu carta.
Estimado Adolfo:
La gente no va a una cafetería solo a tomar café. Puede que por mi café con leche y especias de calabaza hagan cola en la puerta, pero los clientes esperan mucho más de un barista. Venir a tomar un café es una experiencia contemplativa en este mundo tan ajetreado. En los últimos cuatro años, he ayudado a más de 100.000 personas a desconectar durante unos minutos.
Una pequeña charla con la camarera son unos minutos de tu día en los que no estás pegado al teléfono. La interacción no conlleva ninguna molestia: son solo dos seres humanos entablando una conversación. Algunas personas lo necesitan de verdad. Sumergirse en la mecánica de cómo hacer un café es una pequeña obra de teatro en la rutina diaria. Soy una fanática del café y nada me gusta más que convencer a un cliente para que pruebe una nueva receta.
Entiendo que vuestra propuesta única gira en torno a la variedad de bebidas que ofrecéis y, tras haber pasado un par de meses con mi equipo de compras en comisión de servicio, hay pocas cosas que yo no sepa sobre el café en grano.
Me saqué el título de Maestra Barista con un 98 % en el examen anual de conocimiento del producto.
En mi empleo anterior gané numerosos premios al barista del mes y me enorgullezco de mi arte cafetero. Además he inventado una serie de patrones populares. Domino los aspectos mecánicos del arte y era la técnica de referencia y formadora del personal en mi antiguo trabajo. Si sabes tratar bien a una cafetera, es una máquina increíblemente fiable.
Estoy en posesión de las licencias pertinentes en materia de seguridad e higiene y siempre soy consciente de la necesidad de mejorar las normas y los procedimientos de trabajo.
Me encantaría concertar una entrevista contigo y quizás prepararte un café.
Atentamente,
Estefanía Fuentes
El encabezamiento de la carta de presentación tiene varios objetivos: etiquetar tu documento con tu nombre y los datos contacto necesarios. Crear un diseño visualmente atractivo.
Saludo de la carta de presentación
Elegir un saludo adecuado en la carta de presentación es la clave para establecer una conexión personal con un tono respetuoso desde el principio de tu carta. Si es posible, debes dirigirte al destinatario de la carta de presentación por su nombre y/o apellido. "Estimado/a" seguido de Sr. o Sra. + el apellido funciona bien en situaciones formales o si no conoces de nada a la empresa. Además, marca el tono de voz formal para dirigirte al lector de "usted" el resto de la carta. Si ya conoces al dueño de la cafetería o se trata de un establecimiento local con un ambiente informal, puedes optar por "Hola + nombre de pila" y redactar la carta con la forma "tú".
Estimado Adolfo:
Objetivo del saludo de la carta: dirigirte al gerente o al propietario del restaurante por su nombre para crear una conexión personal, siempre con un tono educado y respetuoso.
Introducción de la carta de presentación
Los responsables de contratación son personas muy ocupadas con muchas solicitudes que procesar. Por eso el párrafo inicial de tu carta de presentación de barista tiene que captar la atención e ir al grano de forma rápida. Una anécdota dinámica, una afirmación interesante o un hecho relevante pueden ser un buen comienzo.
Puesto que se trata de un empleo de cara al público, ya puedes abordar desde el principio tus competencias más destacadas, para pasar de forma fluida al cuerpo de la carta.
La gente no va a una cafetería solo a tomar café. Puede que por mi café con leche y especias de calabaza hagan cola en la puerta, pero los clientes esperan mucho más de un barista. Venir a tomar un café es una experiencia contemplativa en este mundo tan ajetreado. En los últimos cuatro años, he ayudado a más de 100.000 personas a desconectar durante unos minutos.
Objetivo de la introducción de la carta de presentación: crear un párrafo inicial que llame la atención utilizando un hecho relevante, una anécdota o una afirmación para transmitir tus competencias más importantes y animar al seleccionador a seguir leyendo.
Cuerpo de la carta de presentación
Ya has llegado al cuerpo de tu carta de presentación de barista, que constituye la parte más extensa de su contenido. Este es el lugar donde puedes echar mano de tus rasgos de personalidad y tus competencias, mostrando una imagen de barista de alta calidad. Para que te resulte un poco más fácil escribir esta sección, puedes dividirla en dos subsecciones.
En la primera subsección, prueba el método STAR para crear anécdotas concisas y relevantes. Describe una situación, la tarea requerida para solucionarla, tu acción al respecto, y los resultados que conseguiste. Para que este método funcione bien, deberás elegir situaciones típicas que pueden suceder trabajando como barista.
En la segunda sección, céntrate en tus competencias y tus posibles contribuciones a la empresa. Demuéstrale al seleccionador que merece la pena darte una oportunidad.
Una pequeña charla con la camarera son unos minutos de tu día en los que no estás pegado al teléfono. La interacción no conlleva ninguna molestia: son solo dos seres humanos entablando una conversación. Algunas personas lo necesitan de verdad. Sumergirse en la mecánica de cómo hacer un café es una pequeña obra de teatro en la rutina diaria. Soy una fanática del café y nada me gusta más que convencer a un cliente para que pruebe una nueva receta.
Entiendo que vuestra propuesta única gira en torno a la variedad de bebidas que ofrecéis y, tras haber pasado un par de meses con mi equipo de compras en comisión de servicio, hay pocas cosas que yo no sepa sobre el café en grano.
Me saqué el título de Maestra Barista con un 98 % en el examen anual de conocimiento del producto.
En mi empleo anterior gané numerosos premios al barista del mes y me enorgullezco de mi arte cafetero. Además he inventado una serie de patrones populares. Domino los aspectos mecánicos del arte y era la técnica de referencia y formadora del personal en mi antiguo trabajo. Si sabes tratar bien a una cafetera, es una máquina increíblemente fiable.
Estoy en posesión de las licencias pertinentes en materia de seguridad e higiene y siempre soy consciente de la necesidad de mejorar las normas y los procedimientos de trabajo.
Objetivo de la introducción de la carta de presentación: utilizar el método STAR para elaborar anécdotas que muestren tus competencias, estilo de trabajo y personalidad. Mencionar tu posible contribución a la empresa.
Conclusión y firma de la carta de presentación
Una vez concluida tu carta de presentación de barista, solo te queda ponerle un punto final animando al seleccionador a ponerse en contacto contigo para ofrecerte una entrevista. Una llamada a la acción eficaz te ayudará a conseguirlo. Se trata de una frase que transmite tu interés y entusiasmo por el empleo, invitando al seleccionador a contactar contigo. También puedes volver a dejar aquí tus datos de contacto, como tu número de teléfono. A continuación, termina tu carta de presentación con una despedida formal. "Un saludo", "Saludos cordiales" o "Cordialmente" son fórmulas que siempre funcionan bien en una carta comercial.
Me encantaría concertar una entrevista contigo y quizás prepararte un café.
Atentamente,
Estefanía Fuentes