¿Así que tienes una entrevista de trabajo? ¡Felicidades! Debes de haber escrito un currículum muy bueno. Ahora debes prepararte para dejarlos a todos con la boca abierta y que cancelen todas las demás entrevistas, ¿verdad?
Hemos reunido consejos sobre lo que hay que hacer antes, durante y después de una entrevista de trabajo para que te contraten.
Y por si nuestros consejos no fueran suficientes, hemos pedido a algunos expertos en entrevistas que aporten también sus consejos.
Esto es lo que tienes que hacer antes de tu entrevista:
Normalmente, una entrevista de trabajo cara a cara dura entre 45 minutos y una hora. Aunque a ti como entrevistado te pueda parecer mucho tiempo, el entrevistador necesita valorar si eres la persona adecuada para el trabajo. Pero además de evaluar tus respuestas, se fijará en otras cosas, como:
Los consejos que te vamos a dar te ayudarán a marcar estas casillas, pero conviene saber que una entrevista es mucho más que una sesión de preguntas y respuestas.
Según decía Benjamin Franklin, "Si no te preparas, te preparas para fracasar". En los días previos debes dedicar tiempo para prepararte y causar una buena impresión. Aquí tienes unos cuantos consejos de preparación para la entrevista:
Infórmate sobre la empresa y el puesto al que postulas. Qué hacen, su cultura, logros y su percepción pública. Recurre a:
Hazte una "chuleta" con lo que has descubierto que te servirá por si el entrevistador te hace la clásica pregunta: "¿Qué sabes de esta empresa? ". Si surge esto en la conversación, elabora tu respuesta con lo que sabes sobre ellos, o úsalo para hacer preguntas propias.
La investigación de la empresa puede ayudarte a preparar la entrevista, pero también puede ayudarte a evitar fraudes laborales. ¿Las compensaciones y horarios parecen demasiado buenos para ser ciertos? Las valoraciones anónimas de otros trabajadores pueden ayudarte a descubrir que hay de verdad detrás de una oferta de trabajo demasiado perfecta.
El entrevistador utilizará tu entrevista para dirigir sus preguntas, así que debes prepararte para responder sobre lo que incluiste. Imprímelo y léelo detenidamente para que puedas hablar fluidamente sobre tu andadura y tu perfil.
No sabrás exactamente qué preguntas te harán hasta que entres en la sala, pero las entrevistas siguen más o menos el mismo guion.
Glassdoor ha examinado miles de opiniones sobre entrevistas para seleccionar las más comunes. Estas son las 10 que nos parece más probable que vayan a hacerte:
Algunas preguntas de la entrevista son horribles (“¿Cuáles son tus mayores debilidades?”), pero los encargados de selección de personal siguen haciéndolas. Prepárate siempre para algunas de esas "peores preguntas" o incluso para preguntas trampa.
Además de estas preguntas estándar, prepárate para enfrentarte a una o dos preguntas basadas en un escenario concreto. Estas preguntas ponen a prueba tu capacidad para resolver problemas y si encajarías en el estilo del equipo.
Por ejemplo, para un puesto de dirección, podrían hacerte una pregunta sobre liderazgo: "Notas que un miembro de tu equipo no sigue las indicaciones y parece constantemente distraído o desinteresado. ¿Qué harías tú en esta situación?”
Practica a responder en voz alta delante del espejo. Una vez que estés satisfecho con tus respuestas, pide a un amigo que haga el papel de entrevistador y te dé su opinión. Cuanto más cómodo/a te sientas con tus respuestas, más seguro te sentirás.
El desarrollo de Inteligencia Artificial está dando origen a aplicaciones como InterviewAI o My Mock, que hacen entrevistas y evalúan tus respuestas. La mayoría está en inglés, pero pronto habrá versiones en español.
Google trabaja en Interview Warmup, que hace preguntas y te permite grabar las respuestas en audio para evaluarlas y darte consejos. Por ahora funciona solo para puestos generales, y cinco profesiones tecnológicas.
El Ayuntamiento de Cartagena lanzó en 2024 LORO, una aplicación completamente en Español para entrenar y preparar las entrevistas de trabajo, disponible a través del portal YOMPLEO.
Los entrevistadores te darán la oportunidad de hacer preguntas, esperando que la aceptes. Pero no preguntes solo por preguntar.
Esta parte de la entrevista de trabajo puede hacerte ganar o perder. Piensa bien lo que vas a preguntar. Tus preguntas deben mostrar tu interés por el empleo y la empresa. Fíjate en estos ejemplos:
Preguntas que podrías hacer: | Preguntas que debes evitar: |
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Prepara unas palabras de cierre sobre los motivos que te hacen la persona adecuada para ese trabajo, en caso de que al finalizar la entrevista el encargado te ceda la palabra.
¿Sabes cómo llegar a la empresa? ¿Vas a llegar en coche o en transporte público? Haz una prueba unos días antes de la entrevista, con el objetivo de llegar a la empresa 10-15 minutos antes. Cronometra el viaje y ten un plan de emergencia que tenga en cuenta imprevistos.
Prepara el bolso, cartera o maletín que llevarás con cosas como:
Antes de entrar al edificio, ordena tus pensamientos, respira y serénate. Recuerda que las entrevistas no son un interrogatorio, sino una conversación.
Lo más importante: pase lo que pase en la vida, al final todo va a ir bien. No pongas en juego tu salud emocional por la ansiedad, enfócate en lo importante y mantén la calma.
Si ya estás totalmente preparado y estás listo para empezar, esto es lo que tienes que hacer cuando empiece la entrevista.
Por mucho que neguemos juzgar a la gente por su apariencia, eso es exactamente lo que hacemos. Hay estudios que demuestran que nuestro aspecto está directamente relacionado con los puestos de trabajo que conseguimos y con lo que nos pagan.
Cuando entres en la sala el entrevistador te evaluará de forma inconsciente. Puede que ni siquiera lo notes, pero ocurrirá. Todos lo hacemos. Es imprescindible que tu aspecto cause una buena primera impresión.
Los buenos modales no cuestan nada, pero pueden ganarte las simpatías del encargado de contratación. Muestra educación y respeto por todas las personas con las que te encuentres al llegar a la empresa. Quizás llegue a oídos de tu futuro jefe el buen trato que han recibido de tu parte.
Lo que dices durante la entrevista de trabajo es tan importante como lo que no. El antropólogo Albert Mehrabian sugiere que el lenguaje corporal y gestual representa hasta el 55% de la comunicación entre dos personas, y otros investigadores sugieren que hasta el 80%.
Tus expresiones faciales, gestos y postura dirán mucho sobre ti como persona. Tienes que mostrar accesibilidad y seguridad en ti mismo. Esto comienza en el momento en que atraviesas la puerta de la sala de entrevistas.
Es difícil relajarse por completo en una entrevista de trabajo, pero nunca debes fingir. El entrevistador está intentando determinar si encajas bien en la cultura del equipo.
Si no puedes responder a una pregunta, no tengas miedo de admitirlo. Mostrar sinceridad siempre es mejor que fingir, y el encargado de la contratación te respetará por ello.
El tiempo es esencial durante una entrevista, así que ser capaz de hablar bien y de forma concisa es una de las cualidades que harán que te contraten. El encargado quiere saber todo lo posible sobre ti y tus competencias profesionales.
Formula respuestas cortas, que vayan al grano y relacionadas con la pregunta. Las anécdotas sobre cuando resolviste un problema, superaste un reto, o cometiste un error están bien, pero no permitas que se salgan de contexto.
La entrevista se centra en cómo encajarás en el equipo y cómo contribuirás a resolver los problemas de la empresa, y esa es la narrativa a la que debes atenerte. Cualquier comentario negativo sobre antiguos jefes o compañeros de trabajo, puede suscitar dudas en la mente del encargado de contratación, como estas:
Si te sientes desmotivado en tu puesto actual o estás ofendido por el trato que recibiste, reformula la situación como algo positivo.
Habla de la experiencia adquirida y de cómo sientes que esta oportunidad es un reto adecuado, y que llega en el momento justo de tu trayectoria profesional.
Has salido de la sala de entrevistas y te sientes animado. Las cosas han ido bien. Pero aún no sabes si has conseguido el trabajo. Esto es lo que hay que hacer a continuación.
En cuanto la entrevista haya terminado, haz un balance de cómo ha ido. Anota las preguntas que te han hecho, junto con tus respuestas. Será un material útil que podrás consultar más adelante si hay otra entrevista de seguimiento.
También te ayudará a identificar cualquier cosa que se te haya escapado o que desearías haber dicho para poder mejorar en otras entrevistas. Si mencionaste algo que no deberías decir en la entrevista, anótala también, para que no te vuelva a pasar si tienes que responder a la misma pregunta en el futuro.
Si al final te rechazan en este trabajo, recuerda que no debes tomártelo como algo personal. Aunque en el momento se siente "como un tiro", ya habrá más y mejores oportunidades esperándote.
Haz un seguimiento enviando un correo electrónico de agradecimiento al encargado de la contratación después de la entrevista, incluso el mismo día. Esto te ayudará a mantenerte en primera línea y a causar una buena impresión.
Escribe un correo electrónico conciso. Muéstrale al entrevistador que aprecias su tiempo y la oportunidad que se te ha ofrecido, tocando siguientes puntos como:
Si tienes la suerte de conseguir varias ofertas de trabajo, puede que tengas que agradecer unas y rechazar otras. Hacerlo con amabilidad y profesionalidad puede contribuir a mantener una buena relación con la empresa: nunca se sabe cuándo pueden volver a cruzarse vuestros caminos. No te pierdas nuestros mejores consejos para rechazar una oferta de trabajo.