El sector de la restauración engloba gran variedad de lugares y puestos de trabajo muy diferentes, con tan solo unos cuantos puntos en común. Por suerte, tanto si eres camarero, cocinero, barman, lavaplatos o cualquier otro tipo de empleado, la estructura de la carta de presentación no varía mucho entre los distintos puestos. En esta sección te guiaremos punto por punto para escribir una carta de presentación completa que cause la mejor impresión.
El encabezado de tu carta de presentación es como el cartel de la fachada del restaurante: le dice al encargado de contratación quién eres y el estilo personal que aportas. La primera tarea del encabezado es que el empresario tenga a mano tus datos personales. El segundo objetivo es crear atractivo visual y ofrecer una presentación profesional. La forma más fácil de hacerlo es elegir una plantilla de carta de presentación que se ajuste al estilo y la marca del restaurante. Este es uno de los únicos lugares en los que podrás añadir color a un documento que de otro modo sería muy gris, así que te conviene tener claro cómo es tu marca personal y qué dice de ti como candidato/a.
Al igual que el saludo del recepcionista de la entrada puede poner la guinda al pastel o arruinar la experiencia gastronómica de un cliente, el saludo de tu carta desempeña un papel fundamental para fijar el tono del resto.
Por suerte, no hace falta complicarse demasiado. Primero ten en cuenta tu relación con el empresario. ¿Le conoces por su nombre de pila o es tu primer contacto con el jefe de la empresa? Según cómo sea tu relación con él o ella, puedes usar el nombre de pila o el apellido en el saludo de la carta. "Estimado/a" siempre es una buena opción para situaciones formales, pero también puedes utilizar "Hola" en cartas más informales.
Estimada Sra. Díaz:
Dado que los gerentes de los restaurantes suelen tener poco tiempo para leer las cartas de presentación y filtrar a los solicitantes, puede que decidan qué tipo de empleado eres con solo leer el primer párrafo.
Por lo tanto, es importante encontrar una buena introducción profesional que llame la atención y que responda a las necesidades del restaurante. Por ejemplo, puede ser una anécdota sobre una ocasión en la que ofreciste un servicio de atención a un cliente excepcional, una estadística relevante o una declaración personal.
Puesto que su restaurante cuenta con cuatro competidores directos a menos de cinco minutos a pie, entiendo que necesitan un gerente con capacidad para ofrecer una experiencia gastronómica eficiente y agradable en el comedor, así como para garantizar que los estándares culinarios sean impecables.
El cuerpo de tu carta de presentación te da por fin la libertad de entrar en detalles sobre tus objetivos, logros y propósitos en tu trabajo en el restaurante. Puedes hacer que esta sección sea más fácil de redactar utilizando el método STAR para dar ejemplos de empleos anteriores.
Con este método, primero se describe una situación y la tarea requerida, y a continuación tendrás que explicar la acción que emprendiste y el resultado positivo que conseguiste. Asegúrate de que cada ejemplo sea breve y esté claramente relacionado con las competencias necesarias del puesto que solicitas. También puedes utilizar cifras, datos y porcentajes para dar más peso a tus logros e ilustrar tus méritos.
En mi familia ya van tres generaciones que se han dedicado a la cocina italiana. Después de haber sido gerente en el restaurante de mi primo, y tras su decisión de vender el negocio, deseo pasarme a una cadena más establecida. La posibilidad de ascender más adelante a director regional supone todo un reto para mí, y creo que tengo mucho que ofrecer a sus clientes. Terminé mis estudios de Hostelería en la Escuela de Hostelería y Turismo de Alcalá de Henares, y pasé los dos siguientes años en Roma, trabajando para mi tío (que dirige un bistró de cinco estrellas allí). Mis ocho años de experiencia desde entonces han sido en dos restaurantes familiares que han ganado varios premios del sector.
Intento prestar la máxima atención a todo lo que repercute en la experiencia del comensal: fomentar las relaciones con los clientes habituales, supervisar la formación de los camareros, las quejas de los clientes e incluso atender las mesas cuando teníamos poco personal. Los gerentes de un restaurante italiano deben tener visibilidad y estar involucrados.
El índice de satisfacción de los clientes en mi anterior empleo pasó del 85 % al 98 % desde que empecé a trabajar allí. Aumentamos el gasto por cliente en un 28 % mediante la ampliación del menú y mejoramos los beneficios centrándonos en nuestra base de costes y reduciendo desperdicios, sin dejar de pagar al personal los mejores salarios del mercado.
Mi naturaleza proactiva y mi profundo conocimiento de la cocina italiana me permiten involucrarme en la preparación de las comidas y me esfuerzo por tener relaciones estrechas con mis chefs para conseguir los mejores ingredientes posibles y liderar la elaboración de un menú excelente. Con un 36 % de clientes que repiten y una presencia activa en las redes sociales, dejé el negocio en una situación excelente para su venta.
Por fin has llegado a la conclusión de tu carta de presentación. Esta sencilla sección tiene como objetivo dejarle una impresión positiva al encargado de la contratación, para que se interese en saber más de ti. La forma más fácil es a través de una llamada a la acción. Esta frase transmite tu interés y entusiasmo por el empleo, invitando al encargado a ponerse en contacto contigo. Si el espacio lo permite, puedes volver a dejar tus datos de contacto en esta sección.
Me encantaría poder hacer cosas similares en Via Verona, tanto como gerente como potencialmente a nivel regional más adelante.
Atentamente,
Julio Rossi
Tanto si has trabajado antes en un restaurante como si esta es tu primera experiencia laboral, hay algunas cualidades clave que pueden lograr que tu carta de presentación destaque: