Las referencias personales de tu hoja de vida o solicitud de empleo son los datos de aquellas personas que te conocen y pueden dar fe de tu personalidad, tus habilidades y aptitudes.
Poner referencias personales en el currículum era una práctica estándar en años anteriores, pero en la actualidad existen criterios encontrados al respecto. Hay quienes consideran que ya no son tan necesarias, mientras otros piensan que aún son indispensables.
La preferencia también cambia según el país, y el idioma en el que se escribe el CV o la oferta laboral.
¿Qué hacer? Lo mejor es verificar si las referencias personales son un requisito indispensable para el puesto que buscas o para la empresa a la que te vas a postular.
Para empezar, asegúrate de leer muy bien la oferta de empleo y verificar si explícitamente solicitan que las incluyas o no. También verifica si debes incluirlas dentro de tu currículum, o en una hoja adicional.
Si no se mencionan en la oferta de trabajo, es mejor no incluirlas y esperar hasta que te las pidan. Es posible que los encargados de contratación las soliciten solo a los candidatos que superen las primeras etapas del proceso de selección.
En caso de que una empresa contacte a tus referencias personales, lo más probable es que quieran saber sobre tu personalidad, actitudes, valores, etc. Pero también evaluarán el tiempo que tienen de conocerse y el tipo de relación que tienen.
Las referencias laborales sirven para verificar tu desempeño en empleos previos, pero si los encargados de contratación solicitan tus referencias personales, su objetivo principal es validar tus rasgos de personalidad y tus habilidades blandas.
A diferencia de las laborales, las referencias personales no necesariamente tienen que provenir de personas con quienes hayas compartido directamente en un empleo.
Las empresas podrían recurrir a tus referencias personales para averiguar cómo actúas socialmente, o cómo te comportas al interactuar con grupos de trabajo. Si eres organizado, si influyes en otras personas, si funcionas bien en tareas colaborativas, y otras situaciones de tu desempeño social.
Una referencia personal puede contribuir a resolver dudas sobre tu perfil y comportamiento. Ayudará a establecer si eres compatible con la dinámica de trabajo de la empresa.
Las referencias personales son de gran utilidad cuando no cuentas con mucha experiencia laboral. Pueden proporcionar una idea sobre tu ética, capacidades y rasgos de personalidad, con los que un antiguo jefe tal vez no esté tan familiarizado.
También es útil si eres un recién graduado que aún no tiene mucha experiencia laboral remunerada, pero tienes profesores o empleadores casuales que pueden hablar de tus cualidades.
Cuando te solicitan referencias personales, las empresas están más interesadas en conocer habilidades interpersonales, que en logros laborales específicos.
En cualquier caso, siempre es útil mantener una lista actualizada de referencias personales. Debes asegurarte, eso sí, de contar con el permiso explícito de todas las personas que cites, antes de usar sus nombres e información de contacto en tus referencias personales.
Lo recomendable es que les informes de que te encuentras en búsqueda de empleo. Hazles saber sobre tus intenciones y sobre las ofertas a las que has aplicado para que puedan aportar información valiosa sobre ti en caso de que sean contactados.
Al incluir referencias personales dentro de tu currículum estás autorizando que contacten a esas personas y les pregunten acerca de ti. Ese contacto puede darse por medio de llamadas telefónicas o de correos electrónicos.
Es normal que la empresa indique el número de referencias personales que necesita. Si no lo hace, es una buena idea incluir entre 3 y 5.
Las referencias personales deben ser de personas que te conocen lo suficientemente bien como para proporcionar una buena visión de tu personalidad y carácter general.
Los candidatos ideales para incluir como tus referencias personales son quienes ocupan puestos de más autoridad que el puesto que buscas. De preferencia, elige personas a quienes tu potencial empleador pueda identificar como relevantes y dignos de confianza.
Entre los ejemplos más tradicionales están profesores o autoridades académicas, excompañeros de trabajo, de estudio, o líderes de organizaciones en las que has participado como grupos de voluntariado, recreativos, deportivos o incluso religiosos.
Aunque suene obvio, es necesario que la persona a quien cites tenga un buen concepto de ti para que pueda comunicar y justificar sus buenas percepciones. Si tienes alguna duda sobre si una persona dirá cosas buenas sobre ti, es mejor que pienses en otra.
Las personas que elijas también deben estar abiertas a tomarse el tiempo necesario para hablar sobre ti, ya que probablemente tendrán que contestar alguna llamada, responder emails o incluso escribir sus impresiones en una carta de recomendación.
Cuanto más tiempo tengas de conocer a la persona y mayor sea el número de circunstancias en las que te haya conocido, mejor funcionará como tu referencia personal.
Si un encargado de contratación contacta a tus referencias personales, lo hará buscando obtener una visión integral de tu personalidad y capacidad para desempeñarte con éxito en su empresa.
Es por eso que si tu contacto ofrece respuestas muy vagas, demasiado generales o breves, éstas no serán de mucha utilidad.
Por eso no es una buena idea seleccionar personas con quienes solo hayas tenido una interacción casual o breve. Es necesario que tu referencia sea capaz de proporcionar un criterio claro y genuino sobre ti.
Tampoco debes anotar a familiares de primer grado (como padres, hermanos o cónyuge), ni a los amigos de tu círculo más cercano. Algunas empresas incluso lo prohíben.
Para un profesional de recursos humanos es fácil notar si las opiniones de tus referencias son sesgadas, por tratarse de personas muy cercanas que solo dan opiniones subjetivas sobre ti. En estos casos las referencias perderán credibilidad y validez.
Lo mejor es elegir personas con quienes hayas trabajado o interactuado, que conozcan cómo te comportas, cuáles son tus fortalezas y rasgos de personalidad.
No debes dar el nombre de alguien como referencia sin asegurarte de que tiene la disposición de hacerlo. A continuación, te damos algunas recomendaciones para obtener tus referencias personales.
Una referencia personal se puede incluir en el currículum, o en una solicitud de empleo, listando los nombres, cargos y datos de contacto de cada persona. También se pueden adjuntar al CV en cartas de recomendación. Veamos estas opciones en detalle:
Si se solicitan, las referencias personales se pueden incluir directamente en una sección de tu currículum, usualmente después de la sección de Experiencia Laboral.
Dependiendo del formato, hay quienes prefieren agregarlas al final del documento. Otros recomiendan adjuntarlas en una hoja aparte titulada sencillamente como “Referencias”, pero que mantenga el mismo diseño de tu CV y tu carta de presentación.
¿Qué incluir? Lo usual es poner el nombre completo, cargo o profesión, lugar de trabajo y formas de contacto: números de teléfono del trabajo, habitación, celular y dirección de email.
Para agregar una lista de referencias personales a tu CV puedes seguir una estructura de lista sencilla como ésta:
Ej.
La carta de referencia personal, también conocida como carta de recomendación personal, se envía para confirmar el conocimiento y la confianza en una persona, y por eso debe redactarse usando un tono positivo, pero formal.
Es un documento de carácter privado en el que la persona da testimonio de conocerte, y da fe de tu buen comportamiento, tus aptitudes y habilidades.
Como regla general no debe exceder de una página, ya que los encargados de contratación podrían estar evaluando a muchos candidatos y su tiempo es valioso. Mantener las cartas descriptivas pero breves también facilitará que las lean completas.
Los ejemplos concretos son importantes. Una lista de cualidades es útil, pero incluir ejemplos que apoyen esas descripciones ayudará a los empleadores a entender mejor cómo podrías funcionar en el entorno de su empresa.
La carta de referencia no debe entrar en detalles personales sobre ti u otros asuntos íntimos que no desees compartir con un posible empleador.
Atención “NOMBRE DE LA EMPRESA”
El aquí suscrito, (nombre de quien escribe la referencia), Gerente de Ventas de la Compañía XXXXXX, portador de la identificación N°###-###, doy fe de que conozco desde hace más de 10 años a Nombre del referido, portador de la identificación N°###-###.
Puedo confirmar que, durante todos estos años de conocer a Nombre, ha demostrado ser una persona trabajadora, responsable, honesta, eficiente y de ética intachable.
De mi experiencia personal con XXXXXXXX puedo destacar sus habilidades de liderazgo, trabajo en equipo, proactividad e iniciativa, las cuales serán de absoluta utilidad para cualquier empresa que cuente con sus servicios.
Estoy en completa disposición de confirmar cualquier información consignada en esta referencia, que se expide a petición de la parte interesada el día, del mes de año.
Atentamente,
Las aplicaciones de empleo pueden tener espacios en los que te solicitan escribir el nombre de dos o tres personas que puedan dar fe de conocerte.
De ellos se pide el nombre completo, su profesión u ocupación, número de algún documento de identidad, números de teléfono, dirección de email u otra información de contacto.
Las empresas que las piden buscan asegurarse de contar con datos de dos o más personas que puedan confirmar que el candidato es quien dice ser.
En este caso las referencias personales se convierten también en una medida de seguridad ante cualquier situación inesperada.
Las referencias digitales no son parte de tu currículum, ni de tu solicitud de empleo, sino que se trata de todas las informaciones que tus futuros empleadores pueden encontrar al hacer una búsqueda de tu nombre en internet.
Los resultados de esa búsqueda sirven para evaluar la información que hay sobre ti en redes sociales y sitios web.
A todas esas informaciones que aparecen en tus perfiles, publicaciones, comentarios y otros sitios en línea se les conoce como tu “huella digital”, la cual ha cobrado gran relevancia para los analistas de contratación.
La expansión del uso de redes sociales, foros, portales y bolsas de empleo digitales, han hecho que la forma de búsqueda de empleo tradicional evolucione, y que tu huella digital sea algo que debas cuidar.
Por medio de tu huella digital los encargados de contratación encuentran información para evaluar tu comportamiento, y que les puede ayudar a determinar si eres una persona apta para el puesto y para la compañía.
También sirve para verificar datos que has provisto en tu CV o carta de presentación, e incluso se puede utilizar para corroborar la validez de tus referencias personales, y su credibilidad.
Por esa razón es esencial que tengas pendiente tu huella digital. Procura que no haya cosas que manchen tu reputación, que afecte la información de tu hoja de vida, ni la información que puedan ofrecer tus referencias.
Como conclusión, recuerda que lo mejor que puedes hacer es investigar si la empresa en la que estás interesado exige referencias personales o no.
En caso de que no las soliciten, te recomendamos que mantengas tu lista de referencias personales actualizada. Puede ser que la empresa las pida durante otra etapa del proceso de contratación o que las necesites para otra oferta.
Si debes incluirlas, recuerda que en CVapp tenemos plantillas y herramientas digitales para que elabores tu currículum de la manera más completa, incluyendo formatos profesionales preparados por expertos que se adaptan a tus requerimientos.