Ya has decidido que es hora de crear un currículum o de actualizar el que tienes. Basándote en tus investigaciones, has llegado a la conclusión de que el formato más adecuado para ti es el currículum cronológico. Hasta ahora todo bien. Pero, ¿has entendido bien lo que es un currículum cronológico y cómo escribirlo?
En pocas palabras, un currículum cronológico es la forma más común de CV, y muestra la experiencia profesional y educativa en orden cronológico inverso (la más reciente primero). El currículum cronológico se enfoca en tu experiencia profesional, al contrario que un currículum basado en competencias, que se centra en tus “hard skills” o habilidades duras en lugar de tu experiencia laboral.
A continuación vamos a profundizar un poco más en el currículum cronológico para ver si en tu caso es la mejor opción. En esta guía vamos a tocar los siguientes puntos:
Un currículum cronológico, también llamado a veces currículum cronológico inverso, es el formato más adecuado si tu experiencia y aptitudes son muy similares a los requisitos mencionados en el anuncio de empleo.
Suele ser la opción preferida de aquellos que tienen una amplia experiencia y conocimientos dentro del sector, pueden demostrar las contribuciones que han hecho al negocio en sus anteriores empresas y tienen una experiencia laboral progresiva. Se hace énfasis en la experiencia, que es lo que busca la empresa según se indica en el anuncio de empleo.
Este formato de currículum presenta varias ventajas, como son:
Pero también está la otra cara de la moneda. Existen algunas desventajas al usar el formato de currículum cronológico:
La mejor manera de superar estas dificultades es asegurarte de tener un CV con un diseño bonito y bien presentado.
Si todas estas desventajas llegan a superar a las ventajas de usar este formato, puede convenirte utilizar otro de los formatos más comunes de currículum: el funcional o el híbrido, que es una combinación del cronológico y el funcional.
El formato de un currículum cronológico es un poco rígido y no debe alterarse demasiado. Hacerlo haría que pareciese extraño o fuese difícil de seguir.
El formato básico de un currículum cronológico es:
Aquí puedes ver un ejemplo de un currículum cronológico.
Nombre y datos de contacto: lo primero que aparezca en tu currículum deben ser tu nombre y datos de contacto. Esto debe figurar en la parte superior de la página, ha de tener el tamaño suficiente para que pueda verse bien y debe contener los siguientes datos:
Puedes poner esta información en la parte superior de la primera página o, mejor aún, ponerla en el encabezado para que aparezca en todas las páginas.
Título profesional: la siguiente parte de tu currículum es el título o profesión a la que te dedicas. Este debería ser el mismo que el nombre del puesto al que solicitas. Con esto el reclutador sabrá en qué puesto estás interesado y también establecerá el tono mientras revisan tu currículum.
Perfil profesional: es bueno empezar tu currículum con un resumen de entre dos y tres frases con tus aptitudes, experiencia o formación relacionada con el trabajo por el que te postulas. Esto permite que el reclutador reconozca rápidamente tus calificaciones y lo anima a seguir leyendo el resto del perfil.
Competencias: el mejor lugar para incluir tus competencias más relevantes es inmediatamente debajo del perfil profesional. Estas suelen mencionarse en forma de lista de puntos, y se incluyen habilidades y talentos relacionados con el empleo. Es bastante común ubicarlas en una columna lateral del currículum. Incluyen tanto las llamadas habilidades duras como las habilidades suaves relacionadas con el trabajo. Las habilidades duras (del inglés "hard skills") suelen figurar como requisitos en la propia descripción del anuncio del empleo. Las habilidades suaves (del inglés "soft skills") son habilidades sociales que complementan tus cualificaciones y te diferencian de los demás candidatos. Aquí se incluyen temas como la capacidad de comunicación, el trabajo en equipo o el liderazgo.
Experiencia laboral: esta sección contiene detalles sobre los empleos que has tenido en los últimos diez años. Aunque tengas más experiencia, esto es todo lo que necesitas incluir porque lo anterior ya no es relevante o ya lo has mencionado en las otras descripciones de empleos previos. Los empleos deben enumerarse en orden cronológico inverso, comenzando por el más reciente.
Al hacer una lista de tus empleos previos, incluye:
A continuación puedes añadir un breve sumario de una o dos frases sobre tus responsabilidades y logros principales. A esto le seguirán tres o cuatro puntos de viñeta que describan logros significativos, contribuciones clave o tareas específicas relacionadas con el puesto que solicitas. Si tu función se explica por si sola, puedes saltarte el sumario e ir directamente a los puntos explicativos.
Formación: aquí debes describir tu formación, tanto la oficial como la no oficial. Empieza con tu título más reciente o más alto y vete hacia atrás en el tiempo enumerando otras titulaciones o certificados. Si terminaste tus estudios oficiales hace ya bastante tiempo, puedes empezar con diplomas o certificados que hayas sacado más recientemente o formaciones extraoficiales que completen tu cualificación para el empleo que solicitas.
Al detallar tus estudios, incluye en la lista:
Asegúrate de incluir también información sobre cualquier curso de formación continua o diploma que hayas sacado y que sean relevantes para el empleo al que optas.
Una vez hayas completado la sección de formación de tu currículum, ya has terminado. Sin embargo, quizás quieras incluir más información adicional. Esto solo debes hacerlo si contribuye a explicar por qué estás cualificado para el puesto que solicitas. Si tu currículum tiene menos de una página, puedes plantearte añadir estas secciones.
Al considerar la posibilidad de añadir contenido adicional a tu currículum, una buena pauta a seguir es que si la información no es relevante para el empleo que te interesa entonces no necesitas mencionarla. Ten en cuenta que las empresas contratan gente por una de las siguientes razones:
Cualquier cosa que pongas en tu currículum debería hablar de uno de estos objetivos. De lo contrario, no lo incluyas. Dicho esto, los puntos opcionales que puedes incluir en tu currículum son los siguientes:
El formato que elijas es flexible, pero debe ser coherente con las otras secciones de tu currículum. La pauta más sencilla es usar el mismo formato que en la sección de formación.
Hay ciertos elementos que nunca debes incluir en tu currículum, como son:
Si tienes mucha experiencia en un campo o sector específico y tu experiencia previa, aptitudes y formación coinciden estrechamente con los requisitos del empleo al que solicitas, el mejor formato para tu currículum es el cronológico. Este se centrará en tu experiencia previa a la vez que entra en detalle sobre tus aptitudes y tu formación.
Tenemos una gran cantidad de recursos a tu disposición para cuando te embarques en la redacción de tu currículum. De ahí podrás sacar muchos ejemplos y plantillas para ir empezando. Así solo tendrás que añadir los detalles específicos de tu trayectoria profesional.
Al redactar tu currículum, ten en cuenta que estás escribiendo para el encargado de contratación. Cualquier cosa que incluyas en él debe tener relación con los requisitos del trabajo que solicitas. Esto le animará a contactar contigo para invitarte a una entrevista, que es el propósito final de cualquier currículum.